LÍNEA PSICODINÁMICA LXXXIV. ETAPA GENITAL
ETAPA GENITAL.
DESARROLLO PSICOSEXUAL. FREUD
Freud intentó mostrar, y lo hizo a través de la clínica (el contacto con sus pacientes) y con el desarrollo de su Teoría Psicosexual, la gran influencia y la huella que las primeras fases (fases pregenitales) dejan en el posterior desarrollo de la personalidad, y sobre todo, en la intimidad de las personas (en su relación de pareja), al mostrar que incluso las personas sanas emocionalmente pueden quedan trabadas en algunos de los ciclos sexuales.
A partir de los 11-12 años comienzan a ser visibles una
serie de cambios a nivel corporal en el hasta entonces niño (a), que a él mismo
le extrañan, le agobian en ocasiones, y su comportamiento empieza a cambiar.
A la entrada en estos cambios se le ha llamado
pubertad.
La
etapa Genital que comienza en la pubertad y está relacionada con los cambios físicos que acompañan a la adolescencia, se prolonga
prácticamente hasta la muerte del sujeto, según Freud.
Los
conflictos no resueltos en etapas anteriores pueden manifestarse en la edad adulta como dificultades en las relaciones intimas, la
identidad sexual, la autoestima, y la autoimagen.
En esta etapa, hay una
integración de las zonas erógenas de las
etapas pregenitales (oral, anal y
fálica), que se convierten en preliminares del orgasmo.
-El deseo relacionado con lo sexual se vuelve intenso, comenzando a
manifestarse sin posibilidad de
reprimirlo con la misma eficacia que en etapas anteriores,
-La organización de la libido
se realiza alrededor de las zonas genitales.
-Si todo ha ido correctamente en las fases anteriores, la etapa genital culminará con los encuentros y finalmente con la pareja; el foco de atención, por tanto, se centra en la elección de objeto
Dentro de la sexualidad adolescente, la masturbación
es considerada normal, ya que en principio, esta tendría una función de
conocimiento de la anatomía de sus genitales
y preparación para las relaciones genitales de pareja; Sin embargo, esta
es vista en ambos sexo con un matiz diferente.
Debido a factores sociales
y culturales, la mujer debe guardar sus genitales mientras que al varón se le
requiere experimentado sexualmente.
Según Freud, la identidad sexual
empieza a desarrollarse desde la formación del niño en la placenta, que es
cuando genéticamente se define el
sexo.
Hay que diferenciar entre identificación de sexo e identidad sexual.
Identificación de Sexo solo
hay dos: masculino y femenino. Está
relacionado con el órgano genital específico
que el sujeto posee.
Cuando un sujeto se encuentra disconforme con el órgano sexual
que le ha otorgado la naturaleza es cuando decimos que su identidad sexual es opuesta
a su identificación de sexo.
La
identidad sexual tiene que ver con la aceptación o rechazo
que el sujeto posee anatómicamente de su identificación de sexo.
La identidad sexual es el reconocimiento que una persona tiene de pertenecer a un sexo, lo que a su vez indica su conformidad o inconformidad con el.
Sin embargo, la verdadera identificación empieza a cocerse en
los primeros años de vida del infante, cuando los padres, consciente o
inconscientemente, buscan inculcar conductas que socialmente sean acordes al
sexo del infante, siendo la adolescencia,
a raíz del desarrollo corporal y los
cambios que se producen y de la atracción física que sienten hacia otros
individuos, donde se cristaliza.
Al inicio de la adolescencia, muchas de las cosas vividas en etapas
anteriores, van a influirle. Algunas de estas cosas son las relaciones que se
han tenido con los padres del mismo sexo, “el cómo” ha sido la interacción de
la pareja parental, las normas culturales que han tocado vivir y lo que se
aprobó y desaprobó en los comportamientos del infante.
La etapa genital comporta dos tiempos definidos por la etapa genital infantil (prelgenita) uno, y el otro por la organización genital propiamente dicha. Considerándose una etapa intermedia entre ambos.'
Al primero le llamaremos adolescencia temprana, donde la organización sexual es infantil, muy
parecida a la que aparecía en la etapa fálica.
En este tiempo los
contactos son predominantemente con personas
del mismo sexo, lo cual supone una forma de reafirmar la propia identidad. Y donde aparecen los patrones sexuales
procreadores y productivos, y la sublimación como mecanismo de
defensa.
El hecho de formar grupos
del mismo sexo les va a proporcionar
compartir vivencias, ensayar y comentar conductas en relación con el sexo
opuesto, lo que a su vez, les va a permitir calmar inseguridades y temores en
relación a estos contactos.
El
adolescente suele enamorarse de personas mayores que
ellos, cuya imposibilidad de accesibilidad
(en la mayoría de los casos) les permite, por otra parte, explorar en
fantasía, sin necesidad de enfrentarse con el objeto del que creen haberse
enamorado.
En la etapa intermedia entre los dos tiempos, el adolescente comienza a
sentirse más seguro y confortable con personas del sexo opuesto y de su edad. Aquí las relaciones amorosas suelen ser
de corta duración, produciéndose el
inicio de la exploración sexual.
Al segundo tiempo, que llamaremos adolescencia
tardía, es cuando realmente se inicia la
adolescencia.
Siendo en
este segundo tiempo cuando aparece la organización genital propiamente dicha. En él, las relaciones son
más duraderas y el adolescente se liga a personas específicas en las que sentimientos y deseos del otro
pasan a tenerse en cuenta.
Suele ser el inicio, de
una relación sexual genital como tal.
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