MISCEÁNEO CXIV. SESGO DE CONFIRMACIÓN. VENDEDORES DE NOTICIAS.

 SESGO DE CONFIRMACIÓN

VENDEDORES DE NOTICIAS

Por Beatriz Santos Dieguez

Una ciudadanía desinformada (información adulterada), es una diana, en su blanco  acribillada.   

           

Simple y llanamente el Sesgo de confirmación es:

Creer una mentira que a ti te gustaría que fuese verdad.

Esto lo saben quienes se dedican a difundir mentiras.

De ello se valen los empresarios dueños de cadenas de radio, televisión, periódicos, etc.,  para dar prioridad a una mentira (aun sabiendo que esta se va a intentar  desmentir después), en lugar de exponer los hechos tal y como son.

En la actualidad la descripción de los hechos tal y como son (aparecen, se presentan) importa poco.

Interesa la difusión de las noticia, aunque esta difusión lleve consigo una trola (como decíamos en mi pueblo cuando éramos chicos), una mentira como una catedral.

Hoy día, los  informativos, (y los dueños de las cadenas de los medios) de todo tipo,  propagan y dejan propagar fake News.

Tanto quienes dan las noticias, como sus jefes, saben que es mentira desde el minuto cero. Han creado previamente un relato  (semilla)  de la noticia a publicar y  difundir, con argumentos que puedan ser creíbles  (pero embusteros) para la audiencia a la que va destinada, para que cuele y se infiltre entre  ellos.

Las audiencias van a subir como la espuma, proporcionando publicidad e ingresos a las empresas (de rotativos, de  radios, televisiones, etc.), por lo que se publica y se emiten, tantas y cuantas veces sea necesario.

Mientras vivimos en nuestras creencias sin cuestionarnos  todo lo que oigamos, leamos o veamos solo quedara aquello que concuerde con ellas.

 Y esto es justo lo que lo que los vendedores de  noticias saben.

 Como lo saben intentan llegar a ellas, a nuestras creencias.

Una vez allí es simple cuestión de ir lanzando como semillas, la preparación de la noticia a difundir,  para que prenda y germine.

Antes de lanzar la semilla  sondean a fondo. Ello es posible a través de las agendas.

Los medios de comunicación, como ya hemos indicado en alguna otra ocasión, nacieron con la finalidad de Informar. Informar de todos aquellos hechos que ocurren en nuestro alrededor y lejos de nosotros (a los cuales tenemos poco acceso real).

Todo ello es posible porque en la publicación y difusión de la noticia y en el sector de la comunicación en general, es inexistente una “ley que regule lo que se comunica”.

A pesar de que toda ley esté sujeta a interpretación (lo cual podemos comprobar continuamente en los mass media en la actualidad), serían necesarias formas de regular la comunicación. 

TODO LO PUBLICADO ERA UNA FAKE NEWS

Los poderosos dueños de estos emporios comunicativos, así como periodistas y pseudoperidistas pujan, para que no aparezca nada que pueda regularlos hacia la exposición de la verdad, disculpas públicas por las mentiras y condenas ajustadas al daño causado.

Ellos saben que gran parte de estos negocios (el negocio de la noticia) caerían, llevándose por delante no solo sus fakes New, sino también a todos aquellos encargados de ponerlas en el ojo y oído del consumidor de noticias.

Son las mentiras creadas y publicadas a conciencia a las que me refiero aquí. Cuando alguien se confunde o se equivoca en la publicación y divulgación de un dato o noticia, el tratamiento es diferente. Basta con  poner en conocimiento de la ciudadanía dicha equivocación y pedir disculpas.

Los debates (en radio y televisión) de opinión, formarían parte de la construcción social de la realidad, que seria, en caso de la existencia de esta regularización, una opinión informada. Donde cada cual expone su punto de vista, pero ante el expectador quedaría claro que son opiniones y no informaciones como tratan de hacernos creer.