MISCELÁNEO XLVI (46). ESTAR EN ONDA O FLOW: MIÁLY CSÍKSZENTMIHÁLYI.

 ESTAR EN ONDA O  “FLOW" : MIHÁLY CSÍKSZENTMIHÁLYI 

Por Beatriz Santos Dieguez

Las nuevas ideas pueden morir tanto por la oposición como por la aceptación no-crítica, y el peligro real de la Psicología positiva es convertirse en un movimiento ideológico (Mihály Csíkszentmihályi,2003)

Mihály Csíkszentmihályi  es uno de los padres de la Psicología Positiva,  al que Martin Seligman (Presidente de la asociación de Psicología norteamericana y Pionero de la Psicología positiva) describió como el más importante investigador en el tema de la Felicidad.

M. Csíkszentmihályi nació en una pequeña ciudad (Rijeka), que hoy tras el Tratado de Paris en 1947, pertenece a Croacia.

Vivió en condiciones muy duras durante la II Guerra Mundial (su  familia era de origen húngaro).  Emigra a Estados Unidos en 1956, donde ingresa en la Universidad de chicago, obteniendo en 1965 el doctorado en Psicología. Poco tiempo después publica su obra Flujo, que se convirtió en un autentico referente para la psicología contemporánea.

Fue profesor de psicología en la Universidad de Claremont (California) y jefe del departamento de psicología en la universidad de Chicago y del departamento de sociología y antropología en la Universidad de Lake Forest. Actualmente se le considera una de las figuras más relevantes dentro de la llamada “Psicología Positiva”.

Ha destacado por diversos trabajos (en libros y artículos) acerca de la felicidad, la creatividad, el bienestar subjetivo y la diversión, pero es más famoso por su creación de la teoría del “Flujo” y por el trabajo que ha realizado durante mucho tiempo acerca de este tema.

En su trabajo “Fluir, la psicología de las experiencias óptimas”,  Csíkszentmihályi esboza su teoría de que la gente es más feliz cuando está en un estado de Fluir, concentración o absorción completa en la actividad o situación en la que se encuentra. Esta idea es idéntica a la sensación de “estar en onda”, es decir, completamente absorto en algo y feliz a la vez.

En una entrevista Csíkszentmihályi describió el fluir como  “el hecho de sentirse completamente  comprometido con la actividad por sí misma: Todo nuestro ser está allí,  aplicando nuestras facultades al máximo, el tiempo vuela y el ego desaparece”.

La mayor aportación de este modelo “Flow” es que cuando sabemos jugar con el nivel de dificultad de la tarea y nuestras habilidades para realizarlas podemos experimentar esa sensación de fluir, donde el tiempo vuela sin ser conscientes, el desgaste de energía es mínimo y la motivación muy alta.

Las fortalezas personales es una de las vías con las que podemos entrar en el canal de Flow, por eso conocerlas es tan importante, porque nos permitirá organizar nuestro trabajo, nuestro ocio, o incluso nuestra forma de comunicarnos de manera que disfrutemos con lo que estamos haciendo y al mismo tiempo consigamos un rendimiento optimo.

Quizás fue el primero en describir  el concepto de Flujo en la psicología occidental, pero no ha sido el primero, como él mismo reconoce, en cuantificar dicho concepto o desarrollar aplicaciones basadas  en el mismo.

El placer aparece en el límite entre el aburrimiento y la ansiedad cuando los retos se equilibran con la capacidad de la persona para que actúe (Mihály Csíkszentmihályi)