MISCELÁNEO VIII. SOMOS ENERGÍA
SOMOS ENERGÍA
Por Beatriz Santos Dieguez
Una manera de reprogramar el subconsciente es repetir y repetir
hasta que se crea un hábito.
Las creencias
son una fuerza poderosa dentro de nuestra conducta.
Es bien sabido que si alguien realmente cree
que puede hacer algo, lo hará, y si cree que es imposible hacerlo, ningún
esfuerzo, por grande que este sea logrará convencerlo de que se puede realizar.
Las creencias o supuestos que tenemos acerca de
nosotros, de los demás o el mundo, suelen
producir pensamientos concretos, por
ello es necesario modificar
esas creencias (limitantes) más generales que van relacionadas con el pensamiento. Para conseguir esto, inicialmente hay que identificar eficazmente los pensamientos.
Un pensamiento poco
tiene que ver con un hecho inamovible, aunque
en la mayoría de los casos nosotros actuamos como si así fuese.
Bruce Lipton
sienta las bases de la nueva epigenética[1].
Sus descubrimientos en torno a la membrana
celular y el estudio de la física
cuántica le han llevado a criticar duramente la medicina convencional
basada fundamentalmente en la farmacología.
Opina que en la ciencia médica actual hay cosas que se hacen
bien, como por ejemplo la traumatología,
pero considera que se tiene que aprender
cómo funcionan las células y toda la bioquímica del organismo.
Según su pensamiento y sus descubrimientos, hay dos
cuestiones básicas respecto a la medicina
actual occidental ortodoxa, que son bastante cuestionables:
1) Los médicos que practican la medicina actual occidental
ortodoxa no saben cómo funcionan las células (según ellos, la vida está
controlada por los genes, él demuestra que las células se modifican según la
información que le llega del entorno).
La ciencia epigenética ha permitido que tengamos una visión
muy distinta sobre el control de la vida.
Durante las últimas décadas el determinismos genético abalado y apoyado por el Proyecto Genoma Humano ha ido perdiendo
fuerza debido a las investigaciones
epigenética que muestran que los genes no son el destino, sino que las influencias medioambientales como la nutrición,
el estrés o las emociones pueden
modificar los genes sin alterar su
configuración básica.
2) La medicina actual está basada en la física de Newton, no
reconociendo la energía (es
necesario que la biología integre tanto la mecánica
cuántica como la newtoniana).
La física cuántica
aparece a principios del siglo XX y demuestra que al mirar dentro de un átomo
veremos electrones, protones, neutrones y dentro de todo esto solo hay energía.
La medicina actual occidental intenta cambiar la química del organismo con
drogas, la nueva medicina (la cuántica)
propugna que hay que cambiar la energía, respondiendo, de este modo, más al
campo energético que al físico.
La ciencia más
reciente indica que el cuerpo responde a
la física cuántica que dice que todo
es energía: lo que se ve y lo que no se ve.
La mente es energía.
Cuando pensamos, transmitimos energía.
Las propias creencias se convierten en un campo energético, una
transmisión (de información), y esta se transforma en una señal que es capaz de
cambiar el organismo.
[1] La
ciencia epigenética significa literalmente control sobre la genética.
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